sábado, 9 de junio de 2007
I. EL AHOGO
EL AHOGO.
Una línea de luz
Giro con velocidad creacionista
Hasta cerrar el circulo en aras de su imperio,
Y llegado el momento de la caída del sol
Un lucero cegador se abrió paso entre los astros
Para respirar
Para gritar
Para inspirar y exaltar
A todo aquel que creyera mas en su voluntad
Que en dejar que todo siguiera igual.
Y el lucero madrugador encaro a su creador
Desafiando su voluntad
Y violando su condición
Provoco su exilio y no cayo
Provoco su castigo mas no lo acepto
Pues tenia que respirar
Pues debía gritar
Para inspirar y exaltar
A todo aquel que creyera mas en su voluntad
Que en dejar que todo siguiera tan igual.
Exaltados e inspirados
Los astros dividieron el firmamento
Polarizando los tiempos
Y creando un nuevo equilibrio
Oculto y racionalizado
Cada quien en su trinchera
Destrozando la superficie
Con el único objetivo
De imponer sus directrices
A quienes no cedían en sus fundamentos
Provocando guerras
Levantando templos.
Pues tenían que respirar
Pues debían gritar
Para inspirar y exaltar
A todo aquel que creyera mas en su voluntad
Que en dejar que todo siguiera igual,
Tan malditamente igual.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario